La conferencia se abordó desde el punto de vista de las tintas sostenibles de impresión flexográfica, eficiencia energética y ahorro de material.
Cuando se habla de prácticas sostenibles en impresión flexográfica, el primer tema en ser abordado es la tinta, pues al tener como base un solvente los compuestos orgánicos volátiles liberados a la atmósfera representan un problema de contaminación, además de un riesgo biológico para las personas. Este fue un tema de discusión en el Virtual Drupa en donde Jordi Puig, Brand Manager y Business Developer de Comexi Flexo, habló sobre estrategias sostenibles en impresión desde el punto de vista de las tintas, eficiencia energética y ahorro de material.
Primero, al hablar de tintas sostenibles de impresión flexográfica, se tienen tres grandes referentes: tintas a base de agua (WB), tintas UV-LED y tintas Electron Beam (EB).
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Las tintas a base de agua (WB) contienen menos del 5% de solvente y poseen incluso más pigmento que las tintas convencionales. El hecho de no poseer solventes hace del proceso más seguro en cuanto a la manipulación de la tinta y los residuos. Hoy en día este tipo de impresión ya equipara la calidad obtenida al utilizar tintas con base solvente. El agua, al evaporarse más lento que los solventes, podría ser una desventaja frente a otras tintas; sin embargo, con la maquina adecuada esto no es una limitante.
Por otro lado, las tintas UV-LED no poseen solvente pues el 100% de su contenido es sólido, gracias a esto se obtienen impresiones de muy alta calidad. Además, su baja migración la hace adecuada para impresión de grado alimenticio.
Por último, las tintas Electron Beam (EB) poseen entre un 80 y 100% de contenido solido. Este alto contenido de sólidos les permite obtener una impresión de alta calidad. El proceso de curado les da unas propiedades excelentes a la abrasión y resistencia química. Además, se pueden obtener acabados superficiales específicos sin necesidad de procedimientos adicionales. Teniendo en cuenta estas tres tecnologías, se pueden dejar de emitir contenido volátil a la atmosfera en casi un 100% con respecto a tintas con base solvente.
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En cuanto a consumo de energía, en definitiva las tecnologías de curado llevan la delantera. Es mucho más eficiente en términos energéticos curar la tinta que evaporar agua o algún solvente. El ahorro utilizando tintas Electron Beam (EB) puede ser hasta del 60%, explica Jordi Puig.
Adicionalmente, en cuanto a reciclaje y sostenibilidad se plantea reducir la cantidad de plástico utilizada y hacer una capa monomaterial con el fin de mejorar el reciclaje, se pasa de una capa convencional de PET sobre LDPE a una capa de PE sobre LDPE.
En conclusión, las empresas deben migrar a este tipo de tintas de manera gradual, además de implementar tecnologías ahorradoras de energía, estrategias de reducción de material y contribuir al aumento del reciclaje de empaques a través de la impresión.